22 Festival de Mar del Plata

Premio Signis: Ficción (Ficció/ Fiction). España, 2006. Dirección: Cesc Gay.

22º Festival Internacional de Mar del Plata - Premio SIGNIS- Ganadora del Astor de Oro

Ficción (Ficció/ Fiction). España, 2006. Dirección: Cesc Gay. Producción: Marta Esteban, Gerardo Herrero, Alta Fims, Messidor Fims. Guión: Tomás Aragay, Cesc Gay. Fotografía: Andreu Rebés. Dirección de Arte: Daniel Gimelberg. Sonido: Albert Gay. Música: Cesc Gay, Xavier Salvá. Montaje: Frank Gutierrez, Elenco: Eduard Fernández, Javier Cámara, Montse Germán, Carmen Pla, Agata Roca.

Una historia de amor

Cuando Cesc Gay comenzó a escribir la historia de su cuarto largometraje sabía que quería hacer una película "de amor". Por lo tanto comenzó a pensar en sus propias historias y en la de sus amigos. Lo que le permitió descubrir, que muchas veces las historias de amor no vividas, tenían un peso inusual en la vida de las personas.

Después de su celebrado Krámpack (2000) y En la ciudad (2003), un filme coral nominado a varios Goya y ambientado en Barcelona, en el cual trabajó mucho las relaciones humanas, y las crisis de gente cercana a los 40 años. Gay vuelve de alguna manera a remontar el personaje de Mario (Eduard Fernández), decidiéndose esta vez a trabajar casi en familia, ya que la esposa del protagonista principal es su propia esposa y la hija mayor es la hija del actor. Dichos datos no son despreciables a la hora de pensar un filme, cuyo nombre es Ficción, y sobre el cual el director expresó en una conferencia de prensa: "que su origen era un poco confuso, ya que tenía un gran peso autobiográfico".

Si bien es cierto que creamos inexorablemente a partir de nuestras experiencias, hay una marca temática, dentro de los filmes vistos en Competencia Oficial en este festival: directores de cine, que están escribiendo su guión y una historia de amor con un peso determinante dentro de éste. Caso, La peli de Postiglione, Ciudad en celo de Hernán Gaffet, y La mujer de la Playa de Hong Sang-soo. Es un punto para reflexionar, el modo en que este séptimo arte, al igual que las artes plásticas, se asocia cada vez más a la vida, donde un "sujeto textual", el que crea, se entrecruza con el "sujeto social", el que se inscribe en un determinado tiempo y espacio. El arte y el cine homologados a la vida. Agregaría, a las experiencias. Paralelamente el fenómeno del auge del documental, un género que se impone cada vez más: contar desde acontecimientos reales.

Ficción es la historia de un director de cine, que está intentando terminar el guión de su próximo filme. Para escribir en un contexto más propicio decide instalarse en la casa de un amigo en la montaña. Cerca de ésta vive otra amiga, que tiene de visita a una violinista. Los cuatro deciden reunirse a compartir charlas, comidas, paseos, la vida"en esos días. Cuyo marco, repito, es el paisaje bucólico y bello de la montaña en Cataluña.

Rodada cronológicamente en 7 semanas, con una fotografía impecable de Andreu Rebés y una banda sonora donde se destaca Nature Boy de Nick Cave, Ficción nos habla de todo aquello que perdemos a medida que el tiempo transcurre, y de todo lo que no podemos vivir porque hemos ya elegido otro camino.

El tema es que todo aquello que no hemos podido vivir por múltiples razones continúa presente en nuestro corazón y en nuestro cerebro, justamente, porque siempre será una asignatura pendiente.

Y la fuerza de las historias no vividas permanece anclada para siempre a nuestro deseo, porque lo alimentan cada vez que recordamos. No se puede escapar de nosotros mismos, porque el amor es una construcción simbólica. Cuando nos enamoramos se produce un determinado mecanismo de proyección, que opera dentro de nuestro universo simbólico, que tiene que ver con nuestro deseo y con la forma en que lo proyectamos a los demás, desde ese lugar se produce "ese sentimiento que llamamos amor".

Con la estructura genérica de una comedia romántica, Cesc Gay logra dar cuenta a través del relato, de cómo opera ese mecanismo y de su resultante: esa mágica unión entre la expectativa y la realización, donde el que mira se descubre a si mismo en esa mirada. Con un argumento y una estética muy diferente, Ficción se emparenta con la inolvidable Con ánimo de amar (In The mood For Love) de Wong Kar-wai, desde lo que representa como historia de amor no vivida. Quizás, tengamos la oportunidad de disfrutar una versión de Cesc Gay de "2046", para ver como recupera esos momentos" ¿perdidos"

Blanca María Monzón 
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