Un atacante le apuntó con un arma de fuego y gatilló a centímetros de su cabeza sin que saliera el disparo, cuando Cristina Fernández de Kirchner llegaba a su casa y saludaba a decenas de militantes ante medios de prensa.
En el anochecer del jueves 1 de septiembre, la vicepresidenta de la República Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, estaba rodeada de gente y también de su custodia, pero nadie pudo prever ni mucho menos impedir la acción del agresor, un hombre de nacionalidad brasileña de 35, quien luego de su fallido intento fue inmediatamente reducido. La situación pudo verse a través de medios televisivos apostados frente a la casa de la vicepresidenta, que desde hace varios días recibe la visita y acampe de cientos de militantes con muestras de afecto y solidaridad, en medio de una acusación de asociación ilícita por obras viales, situación que desde hace varias semanas mantiene en vilo al país y ha ido escalando en acusaciones políticas con resonancias periodísticas, saltando lo estrictamente judicial y teniendo un alto impacto en la opinión pública.
Repudio masivo.
Apenas conocido el atentado, las voces de repudio se hicieron escuchar, no solo del mismo partido gobernante, sino también del arco opositor, si bien algunas opiniones dejaron entrever cierto aire de sospecha en el atentado, la masividad del repudio al accionar violento y el apoyo a la vicepresidenta se hizo sentir a través de todos los medios periodísticos y las redes sociales.
Pocas horas después, el presidente de la nación, Alberto Fernández, realizó un comunicado a través de una cadena nacional, en el que condenó el hecho al referirlo como “el más grave que hemos tenido desde que recuperamos la democracia”, manifestó su apoyo a su vicemandataria y decretó un feriado nacional para el día siguiente, viernes 2 de septiembre, en forma de repudio y para concientizar sobre lo sucedido. Durante la jornada se llevarán a cabo en todo el país movilizaciones convocadas por distintos grupos y sesiones de reflexión en espacios políticos.
Solidaridad internacional.
Mandatarios y líderes políticos de todo el mundo se manifestaron a través de comunicados en sus redes inmediatamente de conocido el atentado contra la vicepresidenta argentina. En la región, el brasileño Lula Da Silva, el boliviano Evo Morales, el chileno Gabriel Boric y el ecuatoriano Rafael Correa expresaron su repudio inmediatamente, lo mismo que Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba.
Por su parte, medios de varios países se ocuparon de cubrir y condenar el hecho, tal el caso de “El sol de México”, “O Globo”, de Brasil, “El País”, de España y “Le Figaro”, de Francia, entre otros.
Mensaje del Papa Francisco.
El Papa Francisco le envió un telegrama a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el cual manifiesta: “Deseo expresarle mi solidaridad y cercanía en este delicado momento”, y agrega “Rezo para que en la querida Argentina prevalezcan siempre la armonía social y el respeto de los valores democráticos, contra todo tipo de violencia y agresión”.
Comunicado de SIGNIS Argentina.
Por su parte, SIGNIS Argentina también se manifestó en un comunicado acerca de este grave incidente: “SIGNIS Argentina manifiesta su total repudio al intento de magnicidio sufrido por la vicepresidenta de nuestro país, Cristina Fernández de Kirchner.
Como comunicadores, apelamos también al cese de violencia simbólica que desde muchos medios de comunicación se ha propagado en las últimas semanas.
Llamamos al diálogo y al encuentro para solucionar los problemas de nuestro país.”
El detenido por el hecho, Fernando André Sabag Montiel, permanece a disposición de la justicia, que anoche mismo allanó su casa. El ciudadano brasileño que intentó dispararle a la vicepresidenta argentina tiene antecedentes por portación de armas. Los testigos del hecho ya se encuentran declarando ante la justicia argentina.
De igual manera, el presidente de SIGNIS ALC, Carlos Ferraro, condenó el intento de magnicidio contra la vicepresidenta de la nación Argentina, Cristina Fernandez de Kirchner. En su mensaje expresó que este hecho “es el resultado de la creciente violencia simbólica generada por los medios hegemónicos y algunas organizaciones civiles de poder en la Argentina. Hoy más que nunca los comunicadores debemos hacer una comunicación apegada a la verdad y con un claro signo de construcción de paz, único camino para fortalecer la democracia donde se pueden ejercer los derechos de los pueblos“, dijo.